El escalope vienés, también conocido como schnitzel vienés, es un plato delicioso y popular de la cocina austríaca y centroeuropa. Esta receta tradicional consiste en un filete empanado de ternera que se fríe en mantequilla clarificada hasta que adquiere una textura dorada y crujiente por fuera, mientras que por dentro se mantiene jugoso y tierno. El empanado, que se realiza pasando el filete por harina, huevo y pan rallado, le confiere un sabor y una textura únicos. Además, su presentación visualmente atractiva y su sencillez en la preparación lo convierten en una opción ideal para cualquier ocasión.
Ingredientes necesarios
Para preparar un delicioso escalope vienés, necesitarás los siguientes ingredientes:
– Filetes de ternera de aproximadamente 200 g cada uno (también puedes utilizar filetes de pollo o cerdo)
– Harina
– Huevos
– Pan rallado
– Sal y pimienta al gusto
– Mantequilla clarificada (para freír)
– Limones (para acompañar)
Pasos para preparar el escalope vienés
A continuación, te detallaremos los pasos necesarios para preparar un auténtico escalope vienés:
1. Prepara los ingredientes: asegúrate de tener todos los ingredientes a mano antes de comenzar. Esto te permitirá cocinar de manera más organizada y eficiente.
2. Prepara una estación de empanado: en tres platos separados, coloca harina en uno, huevos batidos en otro y pan rallado en el tercero. Puedes agregar sal y pimienta al pan rallado para sazonar el empanado.
3. Sazona los filetes: antes de comenzar con el empanado, sazona los filetes con sal y pimienta al gusto. Esto asegurará que la carne tenga un sabor excelente.
4. Empana los filetes: toma un filete y pásalo por el plato de harina, asegurándote de cubrirlo completamente. Luego, sumérgelo en el plato de huevos batidos, cubriendo todo el filete, y finalmente, pásalo por el plato de pan rallado, presionando ligeramente para que se adhiera bien. Repite este proceso con todos los filetes.
5. Calienta la mantequilla clarificada: en una sartén grande a fuego medio-alto, derrite la mantequilla clarificada hasta que esté caliente pero no humeante. Asegúrate de utilizar suficiente para cubrir completamente los filetes al freírlos.
6. Fríe los filetes: coloca los filetes empanados en la sartén caliente y fríelos durante aproximadamente 2 a 3 minutos por cada lado, o hasta que estén dorados y crujientes. Asegúrate de no sobrecargar la sartén para evitar que se enfríe la temperatura del aceite y el empanado se vuelva blando.
7. Retira los filetes y escurre el exceso de grasa: una vez que los filetes estén dorados, retíralos de la sartén y colócalos sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa.
8. Sirve y disfruta: sirve los escalopes vieneses calientes y acompáñalos con rodajas de limón. ¡Están listos para disfrutar!
Tips y recomendaciones para obtener un resultado perfecto
– Es importante utilizar filetes de ternera tiernos y sin grasa para obtener un escalope vienés jugoso y sabroso. Si lo prefieres, también puedes utilizar filetes de pollo o cerdo, aunque el resultado será diferente.
– Asegúrate de pasar los filetes por harina, huevo y pan rallado en ese orden. Esto permitirá que el empanado se adhiera adecuadamente y que el resultado final sea una textura crujiente y dorada.
– Presiona ligeramente el pan rallado sobre los filetes para que se adhiera de manera uniforme. Esto asegurará que el empanado quede bien pegado y que no se despegue durante la cocción.
– Utiliza mantequilla clarificada para freír los filetes. La mantequilla clarificada tiene un punto de humeo más alto que la mantequilla normal, lo que significa que puedes freír los filetes a una temperatura más alta sin que se quemen.
– No sobrecargues la sartén al freír los filetes. Es importante dejar suficiente espacio entre ellos para que se cocinen de manera uniforme y para que el empanado conserve su textura crujiente.
– Para obtener un escalope vienés jugoso por dentro y crujiente por fuera, asegúrate de no cocinarlos en exceso. Freírlos durante aproximadamente 2 a 3 minutos por cada lado debería ser suficiente, dependiendo del grosor de los filetes.
– Al servir los escalopes, acompáñalos con rodajas de limón. El jugo de limón realzará los sabores y complementará perfectamente el empanado crujiente.
Opciones de acompañamiento
El escalope vienés se puede acompañar de diferentes opciones, según tus preferencias y gustos. Aquí te presentamos algunas sugerencias:
– Patatas fritas: las patatas fritas son un acompañamiento clásico para el escalope vienés. Puedes cortar las patatas en palitos y freírlas en aceite hasta que estén doradas y crujientes.
– Puré de patatas: otra opción deliciosa es servir el escalope con un puré de patatas suave y cremoso. Puedes agregar mantequilla y leche para obtener un puré aún más sabroso.
– Ensaladas: una ensalada fresca y crujiente es una excelente elección para equilibrar la riqueza del escalope vienés. Puedes optar por una ensalada verde con hojas frescas, tomates, pepinos y aderezo ligero.
– Salsa: si prefieres un poco más de sabor y jugosidad, puedes servir el escalope con una salsa. Algunas opciones populares incluyen salsa de champiñones, salsa de cebolla o salsa de pimienta.
Variantes y variaciones del schnitzel vienés
El escalope vienés es una receta clásica, pero también se han desarrollado variantes y variaciones a lo largo del tiempo. Aquí te presentamos algunas de ellas:
– Schnitzel de pollo: en lugar de utilizar ternera, puedes utilizar filetes de pollo para preparar un schnitzel de pollo. El proceso de empanado y fritura es el mismo, y el resultado es igualmente delicioso.
– Schnitzel vegetariano: si sigues una dieta vegetariana, puedes preparar un schnitzel utilizando un sustituto de carne, como tofu o seitán. El proceso de empanado y fritura es similar, y el resultado final es un plato sabroso y crujiente.
– Schnitzel relleno: otra variante interesante del escalope vienés es el schnitzel relleno. En lugar de utilizar un filete normal, se utiliza un filete más grande al que se le hace un corte en un lateral para rellenarlo con ingredientes como queso, jamón o espinacas, entre otros. El empanado y la fritura se realizan de la misma manera.
– Schnitzel de cerdo: aunque el schnitzel vienés tradicional se hace con ternera, también puedes utilizar filetes de cerdo para preparar esta deliciosa receta. El proceso de creación es el mismo, y el resultado final es igual de sabroso.
Consejos para conservar el escalope vienés
Si por alguna razón te sobra escalope vienés y deseas conservarlo para disfrutarlo en otro momento, es importante seguir ciertos consejos para mantener su sabor y textura.
– Almacenamiento: coloca los escalopes vieneses sobrantes en un recipiente hermético o cúbrelos con papel film. Asegúrate de que estén completamente fríos antes de almacenarlos.
– En el refrigerador: puedes conservar los escalopes vieneses en el refrigerador durante un máximo de 2 días. Asegúrate de mantenerlos en la parte más fría del refrigerador para evitar que se contaminen o se estropeen.
– En el congelador: si deseas conservarlos por un período más prolongado, puedes congelar los escalopes vieneses. Envuélvelos individualmente en papel film o colócalos en bolsas con cierre hermético. Así estarán listos para descongelar y disfrutar en el futuro.
– Descongelación: si has congelado los escalopes vieneses, es importante descongelarlos de manera segura. Puedes hacerlo dejándolos descongelar en el refrigerador durante la noche. Evita descongelarlos a temperatura ambiente, ya que esto puede favorecer el crecimiento de bacterias.
– Reutilización: para disfrutar de los escalopes vieneses sobrantes, simplemente caliéntalos en una sartén con un poco de mantequilla clarificada hasta que estén calientes y crujientes nuevamente. Asegúrate de no sobrecalentarlos, ya que esto podría hacer que se vuelvan secos.
Conclusión y recomendaciones finales
El escalope vienés, también conocido como schnitzel vienés, es un plato clásico y delicioso que no puede faltar en tu repertorio culinario. Prepararlo es más sencillo de lo que parece, y los resultados son verdaderamente gratificantes. El empanado crujiente, la ternura de la carne y el toque de limón hacen de este plato una verdadera delicia.
Recuerda utilizar ingredientes de calidad, especialmente los filetes de carne, ya que esto marcará la diferencia en el sabor y la textura final del escalope vienés. Además, no olvides seguir los pasos de empanado adecuados para garantizar un resultado perfecto.
Si deseas experimentar, no dudes en probar diferentes variaciones del escalope vienés, como el schnitzel de pollo, el schnitzel vegetariano o el schnitzel relleno. Todas estas opciones son igual de sabrosas y se adaptarán a tus preferencias personales.
¡Así que anímate a preparar un escalope vienés en casa y disfruta de este plato tradicional de la cocina austríaca! Te aseguramos que te sorprenderás con su sabor y textura.
Isabel Montoya Rodríguez